La voz del narrador puro, del novelista de raza. […] Un autor de los pies a la cabeza.

(Santos Alonso, 1996)


Unos personajes que, de auténticos, se vuelven cómplices de nuestra melancolía. Un premio de justicia para una lectura necesaria. […] La vida es un cabaret, un baile de triunfos y fracasos que Antonio Soler ha sabido reflejar en una coreografía literaria excelente.

(Óscar López. Qué Leer. Enero 1997)


Un creador de tipos humanos que impactan arrebatadamente. […] Soler alcanza en esta novela la plenitud de su estatura trágica. […] Un escritor esencial e iluminador.

(Teresa Hernández. Diario 16. 1996)


El lector se queda encandilado con la posibilidad de que Antonio Solé cabalgue de nuevo y d ela mano cada vez más firme de su autor y lo cace pronto para contarle otras historias de ese mundo, que por la magia de su arte le ha hecho compartir con tal fuerza existencial que ya esos imposibles encuentros con la ficción forman parte de sus propios sueños y de sus vanas esperanzas.

(Ignacio Soldevila Durante. Quimera. 1997)


Una novela plena: densa y dura, pero a la vez sencilla, entretenida; repleta de pensamiento. […] Un relato muy cálido, de tono cordial que revela una postura comprensiva y solidaria que no hace ascos a la ternura y a la pureza de algunos sentimientos. Esa visión cervantina se transmite a través de una gran fluidez narrativa.

(Santos Sanz Villanueva. El Mundo. 28-12-1996)


No he de contar […] la belleza y el arte, y la verdad y el talento, de esta novela extraordinaria.

(Ernesto Salanova. El Comercio. Asturias. 16-1-1997)


Antonio Soler ha ahondado en el realismo para deslumbrarnos con todas sus posibilidades.

(Juan A. Masoliver Ródenas. La Vanguardia. 1996)


Las bailarinas muertas representó una verdadera revelación por la arriesgada originalidad de sus planteamientos.

(J.A. Masoliver Ródenas. La Vanguardia. 18-2-2004)


Las bailarinas muertas sitúa a su autor como uno d elos mejores novelistas de su generación. […] Resulta admirable la destreza de Antonio Soler al construir esta novela de registros cambiantes, con elementos de novela de aprendizaje, de thriller, y de narración poética. […] Una de esas obras memorables que, al tiempo que trazan la educación sentimental de varias generaciones, alcanzan una categoría poética superior que configura una alegoría intemporal de la vida humana.

(Francisco J. Díaz de Castro. Diario de Mallorca. 10-1-1997)


El acierto de una escritura eficacísima, cada vez más contenida, que actúa como poderosa aliada de un llamativo talento para orquestar personajes, crear mundos, construir historias, siempre bajo el signo de una elevada ambición literaria.

(Ignacio Echevarría. El País. 7-12-1996)


Antonio Soler, con Las bailarinas muertas, se consagra como un escritor de los grandes de la narrativa española contemporánea. […] Las bailarinas muertas es una narración continua que no da tregua al lector, que se siente impelido a seguir leyendo dejándose arrastrar por ese río de prosa exuberante y ágil, desbordándose por los huecos de la memoria. Una novela bien escrita, inteligente, y, a la vez, romántica, dura pero, al tiempo, tierna, que les recomiendo sin dudar.

(María García-Liberós. Levante. Dic. 1996)


Una de las mejores novelas que se hayan escrito de un tiempo a esta parte. […] Antonio Soler […] ha sido la revelación de la temporada.

(Ramón Jiménez Madrid. La Opinión. Murcia. 1997)


La propia escritura tiene mucho de deslumbrante flash fotográfico.

(Juan Cobos Wilkins. Reseña? 1997)


Todo un ejercicio de pura literatura en su estado más noble. […] La literatura de Soler te atrapa de tal manera que ni te permite dejar de leer hasta que alcanzas el punto final ni te consiente relajarte en la lectura.

(José Castro. Sur. 7-12-1996)


La novela que alguna vez nos hubiera gustado escribir.

(Francisco Morales Lomas. Diario Málaga-Costa del Sol. 1-6-1997)


Es el milagro estético de la creación, los resultados literarios fulgurantes de un escritor dotado de una sensibilidad extremada y unos recursos narrativos fuera de lo común.

(Nicolás Miñambres. Diario de León. 1997)


Antonio Soler […] ha dejado de ser una de las grandes promesas de la literatura de las últimas generaciones y ha pasado a erigirse en una figura aposentada y firme en el mundo de la narrativa. Su calidad literaria lo corrobora.

(Juan Francisco Castillo. La Verdad. Murcia. 31-1-1997)


Un libro magistral.

(Le Figaro. Gérard de Cortanze)


Una novela que es un soplo de eternidad. […] Una prosa sorprendente que confecciona y amalgama imágenes inusitadas dando cuerpo y alama a cada personaje, a cada situación. Se trata de una de esas novelas que una vez terminada su lectura, arden con tal fuerza en nosotros que pasan a convivir en nuestro imaginario. […] Soler no fabrica “novedades”, trabaja con el eterno de la vida y de la poesía.

(Laura Janina Hosiasson. Jornal da Tarde. Brasil. 23-5-1998)


Una obra narrativa de gran vigor y belleza.

(Ana Maria Agra. Correio Brasiliense. 11-6-1.998)


Javier Marías, Manuel Vázquez Montalbán y Almudena Grandes han conseguido atraer el interés de muchos lectores italianos y europeos, atraídos por la novedad del lenguaje y la originalidad de sus historias. Entre estos nombres añadimos el de Antonio Soler.

(Gabriele Morelli. Il Giornale. 23-4-2000)


Bello, sugerente y atractivo […] el libro es un amarcord conmovedor y rico de personajes extravagantes pero profundamente veraces y humanos.

(Sergio Pent. L´Unità. 2-6-2000)


La obra posee las mejores características de la novela contemporánea y, al mismo tiempo, la esencia poética de la literatura tadicional.

(Marcos Losnak. Foiha do Paraná. Brasil. 13-7-1998)


Extraordinaria narración. Una obra que derrocha ternura, amor y suspense.

(El Sermanal 15-I-97)